Para el diseño de los elementos de los que debería constar una guía didáctica de un curso a distancia para adultos, he seleccionado un curso de nuevas tecnologías aplicadas a la educación. En particular, se trataría de un curso de ofimática en cualquiera de sus vertientes: procesadores de textos, hojas de cálculo, bases de datos, tratamiento de imágenes, etc. La razón fundamental estriba en que actualmente son muchos los docentes que solicitan cursos a distancia para bien iniciarse, bien profundizar en las herramientas que nos proporcionan las nuevas tecnologías para hacer más eficiente y profesional su día a día en las aulas, tanto desde el punto de vista educativo como desde el punto de vista burocrático o administrativo.
Tras estudiar diversas opciones disponibles en la web a propósito de guías de cursos, sobre todo en este interesante documento del Dr. Lorenzo García Aretio disponible en la web de la UNED (
http://www.uned.es/catedraunesco-ead/editorial/p7-2-2009.pdf), considero que nuestra guía debería contar con los siguientes apartados básicos:
1.- Presentación
2.- Objetivos.
3.- Contenidos.
4.- Metodología.
5.- Recursos materiales y tecnológicos.
6.- Foros y chats.
7.- Evaluación.
8.- Entrega de tareas.
9.- Comunicación.
Veamos las características principales de cada uno de ellos.
1.- Presentación.
En este primer apartado se incluirán el título del curso, la organización u organizaciones implicadas en la gestión y certificación del curso, las fechas de inicio y finalización, las horas de las que consta, la forma y el plazo de inscripción y matriculación, la identificación de las personas responsables del curso y los destinatarios del curso.
En su caso, deberá hacerse mención expresa al número máximo de plazas admisible en el curso, de la forma y el plazo de preinscripción y del procedimiento de selección de aspirantes tras las preinscripciones.
Considerando además que se trata de formación de personas adultas, también será preceptivo incluir en la presentación un contacto telefónico para la resolución de las primeras dudas que la organización y los organizadores del curso puedan suscitar.
Finalmente, deberá constar un pequeño tutorial sobre la forma de acceso a la plataforma del curso.
2.- Objetivos.
Aquí se dejarán lo más claro posible todas las capacidades que se pretende que el alumno consiga a través de la realización del curso. Muy importante en la educación de adultos que estas capacidades cubran las necesidades, sobre todo de carácter práctico, de las personas a las que va dirigido el curso.
3.- Contenidos.
En este tercer apartado entrarán los contenidos que harán posible alcanzar esas capacidades ya concretadas en el apartado anterior. Se especificará para cada contenido a cuál o cuáles de los objetivos hace referencia.
4.- Metodología.
En este punto los usuarios interesados podrán consultar cómo se va a llevar a cabo la presentación de los contenidos anteriormente descritos y la forma de trabajarlos. Al tratarse de formación de adultos, este apartado de la guía es vital para aquellos adultos que puedan carecer de afinidad por las nuevas tecnologías, de modo que puedan hacerse una primera idea de qué herramientas van a utilizarse y qué tipos de actividades se van a incluir, así como de la secuenciación de los módulos integrantes del curso. En esta dirección, se presentarán las herramientas desde un punto de vista sencillo, motivador y siempre contextualizado a las necesidades de aquellos a los que va destinado. En todo momento se debe hacer constar que la familiarización con dichas herramientas va a ser sencilla y gradual.
Asimismo, y aunque se trate de un curso a distancia, este apartado deberá contener directrices o recomendaciones desde el punto de vista de la temporalización, para que los alumnos puedan tener una idea aproximada en cada momento de dónde deberían encontrarse. De este modo, se evitarán precipitaciones de última hora. Además, se concretarán los posibles plazos de entrega de cada uno de los módulos o tareas parciales.
Finalmente, debe considerarse la posibilidad de incluir algún tipo de sesión práctica con alguna de las herramientas tecnológicas utilizadas, de modo que aquellos que lo deseen puedan familiarizarse con ellas en primera instancia.
5.- Recursos materiales y tecnológicos.
En el apartado de recursos se incluirán todos los diferentes tipos de recursos materiales que se van utilizar, la forma de obtenerlos o de llegar a ellos, y las diferentes aplicaciones básicas involucradas en el curso, junto con la necesaria mención a cómo utilizarlas convenientemente. Un pequeño tutorial siempre será recomendable para no dejar de lado a aquellos alumnos que pudieran estar más retrasados con las herramientas o procedimientos básicos.
Cabe destacar que la mención a la Webgrafía, a la Bibliografía y al Glosario estarán incluidos en este apartado.
6.- Foros y chats.
Conviene dedicar un espacio exclusivo y diferenciado a estas herramientas de interacción asíncrona y síncrona, respectivamente. En el apartado se tratará de explicar la forma de utilizarlos y las ventajas y oportunidades que ofrecen desde el punto de vista didáctico y para alcanzar los objetivos planteados.
7.- Evaluación.
En este apartado se desarrollará la parte de evaluación del curso, de manera que los alumnos tengan cumplida información de cómo superar el curso y obtener la acreditación. En tres niveles:
a) Procedimientos e instrumentos de Autoevaluación y Coevaluación.
b) Procedimientos e instrumentos de evaluación del alumno
c) Procedimientos e instrumentos de evaluación de la plataforma y del propio curso.
8.- Entrega de tareas.
También es importante en la educación de adultos incluir un apartado específico sobre el modo en que los alumnos entregarán las tareas encomendadas. Otro pequeño tutorial será de gran ayuda para facilitarles la tarea.
9.- Comunicación.
Finalmente, con este último apartado se abordará una de las facetas más importantes con las que debe contar la formación a distancia: la forma y el proceso de interacción de cada alumno con el tutor y con el resto de usuarios del curso.
Deberán quedar suficientemente claras las distintas formas que se posibilitan de interactuar a través de la plataforma y de la web, tanto entre el alumno y el tutor, como para los alumnos entre sí, así como los momentos en que pueden y deben ser utilizadas cada una de ellas. Foros, chats, correos electrónicos y el teléfono de soporte deberán detallarse en este apartado final para que los adultos adquieran confianza en el medio, quizá nuevo para ellos, en el que se están moviendo.
